Muchísimas personas, si no todas, pasamos en alguna oportunidad por problemas económicos. ¿Existe algún principio bíblico para poder salir de eso?
Pues sí, hay un principio bíblico, muy conocido por los cristianos, pero muchas veces mal aplicado. Sé que al poner el versículo quizás te puedes decepcionar pero, por favor, sigue leyendo. Si estás pasando por problemas económicos, como yo ahora mismo, estoy seguro que valdrá la pena leerlo hasta el final.
Así que no se preocupen por todo eso diciendo: “¿Qué comeremos?, ¿qué beberemos?, ¿qué ropa nos pondremos?”. Esas cosas dominan el pensamiento de los incrédulos, pero su Padre celestial ya conoce todas sus necesidades. Busquen el reino de Dios por encima de todo lo demás y lleven una vida justa, y él les dará todo lo que necesiten.
Mateo 6:31-33 (NTV)
El principio es sencillo de entender, pero difícil de llevarlo a la práctica: No se preocupen por todo eso.
Quizás me dirás: “Estoy pasando problemas económicos, quizás sin trabajo, con deudas, el futuro se ve incierto, y ¿me dices que no me preocupe?” Pues, eso dice Jesús, que es Dios, no yo.
Pero no solo dice que no nos preocupemos, y aquí es donde en verdad quiero hacer el énfasis, nos dice además que Busquen el reino de Dios por encima de todo lo demás. No es algo pasivo en esperar en Él, sino activo, en vivir para Él.
Como dejé entrever más arriba, yo mismo estoy pasando por problemas económicos serios. No solo económicos, sino también personales, laborales y de salud. Se podría decir que, en cierto sentido, Dios está tratando conmigo como lo hizo con Job.
En este tiempo, además de las muchas cosas valiosas que he aprendido en estos tiempos de tribulación, he aprendido que no basta con descansar en la soberanía de Dios y saber que “Él me va a sacar de esta prueba”, sino que debemos buscarle y servirle activamente en su reino.
Estos últimos 2 días Dios ha sido muy revelador en este aspecto y por eso quise compartirlo contigo. Suena complicado vivirlo, y lo es, pero realmente vale la pena intentarlo.
Es algo paradójico, porque como seres humanos, y quizás en especial como varones (que siempre buscamos ponernos metas y cumplirlas), no podemos descansar si no vemos solución a los temas pendientes. Pero es lo que Dios espera de nosotros.
Si leemos completo el pasaje de Mateo 6:19-34, nos daremos cuenta de varias declaraciones que hace Dios:
- Primero nos exhorta a no buscar las riquezas de esta tierra, que se corrompen y de nada valen para la eternidad.
- Si buscamos las riquezas de éste mundo, estamos mostrando realmente lo que hay en nuestro corazón.
- Buscar las riquezas de éste mundo se convierte en nuestro “amo”, algo que nos domina, mientras que en realidad debemos tener solo a Dios como nuestro amo y rendirnos a Él.
- Finalmente nos muestra cómo Él se preocupa de la creación, los pájaros y hasta de las flores y entonces nos dice ¿acaso no me preocuparé por ustedes?
- Cada día tiene sus propias preocupaciones, no vivan pensando en el futuro sino en el hoy.
El punto 4 es una promesa de Dios, y Él es fiel. Nunca falla en cumplirlas, en su tiempo. Podemos descansar en que Él nos dará alimento y abrigo, y Él se preocupará por nosotros.
Me dirás quizás: “Está bien, Dios me dará alimento y abrigo, y así ha sido hasta ahora (gracias a Dios), pero aún tengo más deudas y problemas económicos mayores, eso no es suficiente”.
A eso yo respondería ¿Acaso Dios no lo sabe? ¿No dice que conoce nuestra necesidad? Ojo que, si realmente estás muy preocupado por las demás cosas más allá de comida y abrigo, fácilmente puedes caer en el primer y segundo punto, sin darte cuenta, y tener un amo que no es Dios.
No obstante, y por supuesto sin querer juzgar tu corazón y tus luchas físicas y espirituales, que yo también tengo, de hecho, mi punto aquí es el punto del pasaje:
Dios no solo nos dice que podemos descansar en su promesa de provisión, y estar en paz, sino que nos manda a buscar su reino y su justicia.
Estos 2 últimos días, Dios me ha dado una fuerte convicción de este principio, y tras obedecer de corazón y con gozo, justamente hoy ocurrió una bendición inesperada que alivia “un poco” mi problema económico. Lo tomo como una muestra de amor de su parte y de confirmación de su promesa… ¡Y no dudé en compartirlo contigo!
No obstante, aún si Dios no nos da más allá del pan y el abrigo, eso es suficiente para tener gozo y gratitud por su amor y bondad.
Como dijo el Apóstol Pablo, para él, el vivir es Cristo y el morir es ganancia. Nuestra vida es pasajera y si Dios nos tiene con vida, ¡Nuestro vivir debe ser Cristo!
¿Qué opinas de esa promesa de Dios? ¿Estás luchando con el problema del dinero? Comparte tu opinión a continuación en los comentarios 🙂